viernes, 18 de octubre de 2013

Estafados, cabreados, indignados, muy enfadados, a punto de estallar.

ladrones, 2013 Abbé Nozal
Estafados, cabreados, indignados, muy enfadados, a punto de estallar. En la pancarta han escrito "¡nos roban!", como si de pronto la realidad les hubiera descubierto el alcance de su voto en las pasadas elecciones: han descubierto que los políticos a quienes votaron dan cobertura a una panda de estafadores. Gritan con cierto candor "¡nos roban!", despertando de un sueño en el que creyeron tener asegurados sus ahorros.
La mayoría son personas mayores, crédulas, actuantes de buena fe, damnificadas por la codiciosa política bancaria.
La mayoría de los estafados han perdido su dinero y su dignidad. Ahora, sin embargo, una pancarta que dice "¡nos roban!" es la prueba de que están decididos a recuperar antes que nada su dignidad. Lo que siempre se llamó "ajustar las cuentas".